Cómo se toma el café en Italia
Los italianos son maestros en muchos campos, incluyendo el sagrado arte de beber café.
Desde el vocabulario asociado con la bebida y el desarrollo de maquinaria para elaborarla, hasta una amplia variedad de mezclas de café y algunos de los cafés más antiguos del mundo, Italia ha dejado una huella imborrable en la forma en que el mundo discute, bebe y disfruta de esta célebre bebida.
El tentador sabor del espresso es elogiado en todo el país y los italianos han creado toda una ciencia en torno a su pedido, elaboración y consumo.
Por eso vale la pena conocer las tradiciones de la cultura cafetera italiana y saber cómo se toma el café en Italia para beberlo como un local.
La ilustre historia del café italiano
Uno de los cafés más antiguos de Europa, y uno de los principales aspirantes a la cafetería más antigua del mundo, es el Caffè Florian de Venecia.
Este opulento café, situado bajo los pórticos de la Piazza San Marco, abrió sus puertas en 1720 y continúa elaborando café para venecianos, italianos y visitantes internacionales, en lo que ahora se ha convertido en un símbolo de la ciudad.
Italia también introdujo en el mundo la primera máquina de café a presión de vapor que cambiaría para siempre el curso de la producción de café: la máquina de café espresso fue patentada en 1884 en Turín y mejorada en 1901 en Milán, dando como resultado las máquinas comerciales que vemos hoy en día, en Delicista.es tienes una buena selección de ellas.
Por último, Italia también inventó el Bialetti Moka Express, o machinetta, en 1933. Esta cafetera termoeléctrica es un elemento imprescindible en los hogares italianos y es elogiada por su diseño icónico y su simplicidad.
El café italiano en la práctica
Los italianos siempre empiezan la mañana con un café y una pieza de bollería en su cafetería habitual. El café se toma generalmente de pie en la barra, en parte porque el pequeño trago de espresso se bebe en menos de un minuto.
Las cafeterías tienden a duplicar el precio de su bebida como propina si tomas el café sentado en una de las mesas del establecimiento. El café suele costar alrededor de 1,00 €, aunque las plazas más informales cuestan 0,80 € y las más lujosas pueden costar hasta 2,00 €.
El primer paso es localizar al camarero al entrar en la cafetería. Pide el café y conserva el recibo (o scontrino), que entregarás al camarero.
Siéntete libre de hacer cualquier especificación en esta etapa. Por ejemplo, si deseas que tu café se sirva en un vaso en lugar de una taza de porcelana, si quieres la leche tibia en lugar de caliente, sólo díselo al camarero y él estará encantado de satisfacer tus necesidades.
Los italianos son conocidos por ser meticulosos con sus pedidos.
El café italiano se elabora según una ciencia precisa que da como resultado mezclas fragantes. Los granos de café Arábica oscuro son los más utilizados, aunque a veces se mezclan con granos de Robusta para obtener un espresso más fuerte.
Los granos se tuestan cuidadosamente hasta que adquieren un tono marrón intenso y tienen un mínimo de aceite, luego se dejan enfriar. Los cafés italianos son lugares ruidosos porque los granos se muelen en el momento, antes de preparar la bebida, para asegurar el mejor sabor del café; sin mencionar el ruido de los platos, los grifos y los hornos de vapor de leche, todo a la vez, durante todo el día.
El café es un ritual que se disfruta varias veces al día: por la mañana para tomar una dosis de cafeína para iniciar el día, después de la comida para ayudar a la digestión y evitar el letargo después de las comidas, y por la tarde para merendar.
Mientras que un espresso o un macchiato son opciones clásicas en cualquier hora del día, los cafés excesivamente lácteos como el cappuccino o el café con leche sólo se deben pedir por la mañana para evitar la indigestión.
El café se sirve a menudo junto con un vaso de agua, para limpiar el paladar antes y después de beber. El proceso es muy rápido: llegas, pides, viertes el azúcar, bebes y te vas.
Aparte de breves conversaciones con el barman local, los italianos no se quedan dentro de la cafetería más de lo necesario. Unas pocas monedas, de 10 o 20 céntimos, pueden dejarse junto a la cuenta como propina para el camarero.
Tipos de café italiano
Conocer algo de la jerga del café italiano te ayudará a poder pedir sin miedo a lo que te van a servir, como mencionan en este artículo.
Verás que no todas las traducciones han conservado su significado original en el extranjero. Si tomas el café descafeinado, menciónalo en tu pedido.
- Caffè o Espresso: Estos términos se usan indistintamente y significan un solo trago de 90 ml de espresso en una taza de porcelana demitasse.
- Doppio: Café Doble, o dos tragos de espresso.
- Americano o Lungo: Un espresso largo que tiene el doble de agua, creando una bebida más diluida.
- Ristretto: Un espresso reducido que utiliza la mitad de la cantidad de agua.
- Macchiato: Espresso que está "marcado" con un chorrito de leche o espuma de leche. El camarero puede preguntar si deseas leche caliente o fría.
- Capuchino: Espresso con partes iguales de leche al vapor y cubierto con leche espumada. Generalmente se pide en el desayuno y nunca después del almuerzo.
- Caffè Latte: Una taza grande de café con leche.
- Caffè Corretto: Espresso que se "corrige" con un licor como la Grappa o el Coñac.
- Caffè Shakerato: Espresso agitado con cubitos de hielo con un almíbar simple, a menudo servido en una copa de cóctel.